Esta semana necesito concentrarme. Tengo que terminar un trabajo. No es el más importante para mí, pero tiene un valor incalculable para quien me lo ha encargado.
Y no quiero llegar tarde.
Está en mi cabeza.
Todos mis sastres y costureras me tienen entretenida.
Demasiado tiempo, siempre más del que tenía pensado.
Es una dulce distracción. Esta semana no puedo caer.
Una semana sin post, sin blogs y sin caralibros....
Que os vaya bonito. Hasta febrero.